Ah, "Los Valles Fértiles del Noroeste"... Permítanme decirles, amigos, que el título evoca praderas ondulantes, tal vez algunas vacas contentas, ¡quizás hasta un concurso de tartas de manzana! Pero no se dejen engañar, como un explorador incauto ante un espejismo en el desierto, porque estamos adentrándonos en un territorio mucho más... "maduro".
Sí, prepárense para "RelatedGuy", ese juguetón guiño en paréntesis que nos recuerda que en los recovecos más verdes de la web, siempre hay una "conexión familiar" esperando a ser desenterrada. Uno casi puede oler el aroma de la tierra húmeda y... ¿la testosterona?
Este "cómic porno" (porque no nos andemos con rodeos floridos) se aventura donde el sol no suele brillar, transformando la promesa de fertilidad en una explosión de... bueno, ya se imaginan. Así que, si buscaban paisajes bucólicos, sigan, sigan, pero si tienen curiosidad por ver cómo la "fertilidad" se interpreta de manera muy literal en el salvaje noroeste... abróchense los cinturones, porque este valle tiene curvas, y no precisamente de río.